Friday, April 18, 2014


  
 LAS CIUDADES HERMANADAS CON TRES CANTOS
                                                                                                                       ASTURQUIN

               Una descripción somera de las cuatro ciudades hermanadas con nuestra ciudad:DAIRA  D´AGÜENIT (Sahara Occidental)    NEJAPA (El Salvador).    M´BINI (Guinea Ecuatorial) Y  SAINT-MANDÉ (Francia).
PRÓLOGO
Llevaba tiempo preguntándome como sería la ciudad hermanada con Tres Cantos y cual sería mi sorpresa cuando descubrí, al comenzar a realizar este pequeño trabajo sobre Nejapa, que era un ciudadano hermanado, también, con otros tres lugares de este Mundo.
 De forma virtual inicie un viaje a ellos introduciéndome en la vida de mis hermanos en mi Tierra, estuve presenciando el fuego que lanzaban mis hermanos nejapenses, pasé varios días en la desembocadura junto a mis hermanos ecuatoguineanos en Mbini, estuve tomando el té con mis hermanos saharauis y me trasladé  a Francia donde mis hermanos saintmandenses me enseñaron algo más de mi precario francés.
Y mientras escribía y soñaba, me emocionaba viajando a esas tierras desconocidas, donde al igual que nosotros soñamos cuando llegamos a nuestro páramo, ellos también lo hacen en sus tierras, esperando para sus descendientes  un mundo mejor.   El Autor.

DAIRA D´AGÜENIT (Sahara Occidental) 




La daira de Agüenit en la wilaya de Auserd, en Tinduf (Argelia) es la localidad cuyo hermanamiento con Tres Cantos goza de mayor antigüedad; data de 1995.

Un lugar donde las familias saharauis viven en condiciones extremas, en las peores zonas del desierto del Sahara, la hammada donde a pesar de ello, han conseguido una sólida organización gracias a su fuerte sentimiento patriótico, construido escuelas, hospitales, centros de formación y de cultura. Un  tesón que se evidencia en los huertos que han creado en el desierto, intentando paliar de alguna forma el abastecimiento.Su Historia va unida  a la diáspora, a la que se vio obligado el pueblo saharaui con motivo de la ocupación de sus tierras por parte de Marruecos, viviendo en situación precaria en zonas desértica, con la esperanza de volver a sus tradicionales asentamientos del Sahara Occidental, donde su vida transcurría por otros derroteros bien distintos en connivencia con los españoles. 
Se hallaban en su patria con seguridad en compañía de sus familias, cuidando de sus ganados, hasta que llegó el tiempo de los egoísmos económicos, ávidos de ellos los países fronterizos. Francisco Franco, el jefe del estado Español agonizaba  y todo cambió. Marruecos y Mauritania anhelaban su territorio.
Hassán II invadía el Sahara Occidental, después de firmar algunos acuerdos con el gobierno de España, a la vez que éste abandonaba el territorio y dejaba en suspenso la promesa de independencia, hasta que este pueblo pudiera gobernarse por sí mismo.De ahí que tras el abandono fuese proclamada la República Árabe Saharaui Democrática y fuese reconocida por varios países, excepto por Francia y EEUU. que se pusieron al lado de Hassan II; y penetró su territorio con su ejército marroquí, arremetiendo contra todo conato de resistencia saharaui, obligando a este pueblo  a emprender la huida  de sus asentamientos, atravesando su propia frontera hacia tierras desérticas de Argelia, principalmente a la hammada de Tinduf  y Mauritania. 
Con la llegada del alto el fuego, en la guerra que mantenían Marruecos y el Frente Polisario, garante de los derechos saharauis ante la ONU y ante  la Comunidad Internacional en 1991 y la promesa  de realizar un referéndum de auto determinación, viven en la esperanza de regresar a sus tierras y que finalice la ocupación militar mantenida por Marruecos, desde hace más de treinta años. 
El Ayuntamiento de Tres Cantos contribuye actualmente dentro de su Área de Acción en Cooperación al Desarrollo, con un programa de vacaciones en Paz,  con la construcción y equipamiento de un hospital, en la caravana de la Solidaridad y la adquisición de seis camiones trailer, enviados a los campamentos con todo tipo de ayuda humanitaria y con motivo de las últimas inundaciones el apoyo a la construcción de viviendas.

 NEJAPA (El Salvador) 
Nejapa, es una ciudad de Centro América perteneciente a la república de El Salvador. Limita al Norte con Quezaltepeque y Aguileras; al Este con Guazapa y Apopa; al Sur con San Salvador y Santa Tecla; y al Oeste con Quezaltepeque. Administrativamente se compone de 8 cantones y 38 caseríos. El municipio cubre un área de 83.4 km² y la altitud de la cabecera es 450 m. sobre el nivel del mar.
Su territorio lo surcan los ríos de San Antonio y Acelhuate y las quebradas de Los Limones, La Calera, Honda, El Rosario, Los Chinitos, El Coyol, Las Garzas, El Puerto, Los Amates, Las Conchas, Mejada y Agua Tibia. El río de San Antonio, se forma de la confluencia de dos quebradas sin nombres, 3.8 Kms al SW de la ciudad y corre con rumbo NE. recibiendo la afluencia de las quebradas: Honda, Los Amates, Los Limones y La Calera, hasta su desembocadura en el río Acelhuate.
Con una longitud 13.5 Kms., El Acelhuate, nace fuera del municipio y entra a formar parte de él, 4.3 Kms., al E de la ciudad; corre dirección N sirviendo como límite natural con los Guazapa y Apopa; recibe la afluencia de los ríos San Antonio y Las Cañas, así como de varias quebradas, entre ellas: El Puerto, Las Garzas y El Rosario. Accidentes orográficos son los cerros Redondo o Tutultepeque, Ojo de Agua, La Tabla, Nejapa, El Jute, Picudo y la loma El Cerrito y pertenece al municipio una franja del costado NE. del volcán de San Salvador o Quezaltepec.  El cerro Redondo o Tuteltepeque se encuentra situado 10.1 Kms., al N de la ciudad, elevándose sobre el nivel del mar a 580 m. El Ojo de Agua, situado a 5 Kms., al N de la ciudad de Nejapa que se eleva a 640 m. El Nejapa está situado al E de la ciudad de Nejapa y de sus faldas parten varias quebradas que desembocan en los ríos Acelhuate y El Angel (municipio de Apopa), elevándose a 918.78 sobre el nivel del mar.
Su clima es cálido, presentando una temperatura más agradable al S, pertenece al tipo de tierra caliente y templada. Las precipitaciones anuales oscilan entre 1.800 y 2.000 mm.    La flora está constituida por bosque subtropical y bosque muy húmedo subtropical, siendo las especies arbóreas más notables el papaturro, conacaste, morro, roble, chaparro, nance, capulín de monte, ojushte, zopilocuavo y níspero.
      Entre los tipos de roca se encuentran  las de lava basáltica, andesíticas y  materiales piroclásicos y suelos de tipo: andosoles y regosoles, inceptoles y entisoles (fases de onduladas a alomadas). Regosoles, latosoles, arcillo rojizos y anaosoles. Entisoles, alfisoles en inceptisoles (fases alomadas a montañosas accidentadas). Latosoles arcillo rojizos y litosoles alfisoles (fase pedregosa superficial de ondulada a fuertemente alomadas, de pedregosidad variable). Regosoles y litosoles. entisoles (fases de tobas consolidadas onduladas a fuertemente lomadas). Su área rural es de 83.10 Kms. cuadrados aproximadamente.
Al área urbana corresponde 0.26 Kms cuadrados aproximadamente, y la población estimada es de 31,484 habitantes, en el año 2000, según datos recogidos del Instituto Geográfico Nacional. Su economía se basa en el cultivo del café, granos básicos y frutas. También hay crianza de ganado vacuno, porcino, y aves de corral. Además se encuentran embotelladoras de bebidas, panaderías, carpinterías, molinos de nixtamal, etc. Hay locales comerciales de farmacias, zapaterías, ferreterías, comedores y otros. Tiene servicios públicos de Iglesias, centros educativos, planta de desechos sólidos, parque, mercado, policía, casa comunal y de cultura, agua potable, transporte colectivo, entre otros. Las fiestas patronales se realizan del 27 al 30 de septiembre en honor a San Jerónimo. Nejapa forma parte del Área Metropolitana de San Salvador.
Desde el 15 de septiembre de 1922 se celebra las «Bolas de Fuego», en la cual dos bandos conformados por decenas de jóvenes, protegidos adecuadamente, se lanzan bolas incendiarias, hechas de trapos y alambres empapados con gasolina y gas. La festividad se realiza en el marco del denominado «Día de la Juventud Nejapense» cada 31 de agosto. No se sabe del origen de esta festividad, una de las versiones es que  proviene de la lucha que sostuvieron San Jerónimo y el Diablo, cuando se lanzaron entre sí bolas de fuego; otra asegura que surgió en conmemoración de la lava del volcán  de San Salvador a la localidad en 1917, mientras hacía erupción y una imagen del Santo fue llevada por los pobladores para evitar el daño. Una última se basa en el hecho que nació para conmemorar la desaparición del poblado, por la erupción de este mismo volcán en 1658. El templo de Nejapa está dedicado a San Jerónimo doctor, con un altar de estilo barroco del siglo XVII. Son mencionadas las haciendas de los padres Aguilar (Nicolás, Vicente y Manuel). La población precolombina de Nejapa fue pipil.
La palabra Pipil es un término náhuat que proviene +de Pipiltzin que significa noble, señor o príncipe, aunque también se deriva de Pipiltoton, que significa niño, muchacho u hombrecito. El nombre fue dado a las tribus nahuas que había en El Salvador y otros países de Centroamérica, por los tlaxcaltecas y otros pueblos del mismo tronco lingüístico de México.

Algunas poblaciones ubicadas en lo que ahora son los estados mexicanos de Durango, Zacatecas y San Luis Potosí, pasaron a Veracruz a mediados del primer milenio después de Cristo; sobre 800 d.C., algunas de ellas pasaron a Soconusco, en la actual parte sur de México, dando origen a los pipiles. Cien años más tarde estos pasaron a varias regiones de Guatemala, Honduras y El Salvador, fundando hacia el 1200 d.C., el Señorío de Cuzcatlán que se extendía desde el río Paz hasta el río Lempa, es decir cubría gran parte del occidente y centro de El Salvador.
En 1524, fueron conquistados los pipiles de Isquintepeque por Pedro de Alvarado y en 1528 el Señorío de Cuzcatlán, (San Salvador) donde sobrevivió su lengua y cultura, aunque siglos más tarde, en 1932, cuando se produjo el levantamiento campesino, reprimido con severidad por el gobierno del general Maximiliano Hernández García, produciendo la muerte de miles de indígenas pipiles, dio lugar a que muchos abandonaran su lengua y tradiciones. Según todos los indicios, el antiguo pueblo  de Nejapa, estuvo ubicado en las cercanías de la localidad de Opico. El volcán El Playón con su erupción de 1658, obligó a sus habitantes a desplazarse a Quezltepeque y, posteriormente, al sitio que ocupa en la actualidad.
En 1770 pertenecía a la parroquia de San Salvador, y en 1786 al partido de San Salvador. Administrativamente, Nejapa fue parte de San Salvador entre los años 1824 a 1838, y al Distrito Federal de la república de Centroamérica entre 1836 y 1839. La cabecera obtuvo el título de villa por Decreto Legislativo del 6 de febrero de 1878. En 1892 formó parte del distrito de Tonacatepeque. Obtuvo el título de ciudad el 10 de noviembre de 1959 mediante publicación del Diario Oficial del día 20 de ese mes.
El padre Gutiérrez se refiere a que el rey Carlos III extendió el decreto de fundación de Nejapa, para que se erigiera entre el valle de El Ángel y Mapilapa.  Aquella población ubicada entre Opacu u Opico, y el volcán de San Salvador, se extendía en un valle hermoso y feraz de selvas, por donde discurrían las aguas del llamado río Sucio, llamado así debido a sus aguas turbias y mal olientes. Una comunidad indígena precolombina asentada en el lugar llamado posteriormente San Jerónimo Nejapa, situado entre el río al Oeste y otra población aborigen, ubicado en Quezaltepeque, al Este, en el valle que se conocía con el nombre de Nixapán o Nejapa, que en lengua náhuat significaba río de las cenizas (nix, nesh: ceniza; apa: río). 
       Ocurrió que el valle tembló  y el 3 de Noviembre de 1658, un tremendo terremoto  echó por tierra todo cuando estaba construido. Fray Francisco Ximénez narraba aquellos momentos de angustia, cuando la tierra se estremeció en forma de terremoto y aparecía un nuevo volcán, “toda la ciudad se vino al suelo”, entre ruidos subterráneos y retumbos, cual estruendos ensordecedores procedentes de mil piezas de artillería, mientras brotaban manantiales por doquier  dando origen a innumerables fuentes expulsando agua, mientras un calor insoportable se dejaba sentir en aquel espantoso escenario. En un momento, se abrió una gran fisura en medio del extenso valle, dando lugar a varios cráteres destacándose el que aparecía al Oeste de Quezaltepeque, derramando y expulsando cenizas y lava, principalmente hacia el Noreste, trasportando rocas en ignición, arrasando árboles, animales, viviendas y cuanto encontraba a su paso.
 El cielo se trastocó oscuro, pasando de un azul intenso, a una negrura producida por una inmensa nube espesa que olía a azufre, acompañado todo ello por una lluvia de cenizas cayendo a varias leguas a la redonda, produciendo una gran congoja entre los vecinos de los pueblos de la comarca y esto,  sigue relatando Fray Francisco  Ximénez permaneció varios días “como una caldera que hervía”; los árboles seguían levantándose volteados al igual que las piedras, y a manera de espuma parecían ser juguetes de las fuerzas de la naturaleza destapadas e incontroladas, hasta que fueron amainando y la ignición se enfriaba, llenando “ todo aquel campo, de aquesta manera, haciendo como torres que de lejos parecía una gran ciudad”. Consecuencia fue, aquella erupción de 3 de noviembre de 1658, el que quedase un gran cono de lavas, el volcán del Playón con 140 m. de altura sobre el valle y a 690m sobre el nivel del mar, un cráter de  200 m. de diámetro, del que había salido una colada de magma de 5 Km. de longitud por 2 Km. de anchura. Y aunque la lava había cerrado todo el contorno del antiguo Nejapa, “en lo que toca al pueblo, aclara Fray Francisco, no reventó con más singularidad, que dejó un camino ancho para salir”.
Pedro de Alvarado conquistó en 1525 (1528?) Cuscatlan, que hoy conocemos como San Salvador, siendo reconocido como Gobernador General de las provincias centro americanas, con el título de Adelantado. Fue entonces cuando se organizaron los gobiernos de todos aquellos territorios, superando su administración el caos anárquico y feudal de las encomiendas y adelantamientos de indios que se habían concedido a los conquistadores y pobladores, unificándose el país con la denominación de Reino de Granada, y divisiones diversas, a saber: gobiernos de Soconusco,  Costa Rica,  Nicaragua y Honduras; con la denominación de corregimientos y Alcaldía Mayor: San Salvador y Chiapas, hasta el establecimiento de intendencias reguladas en las ordenanzas de Nueva España y que fueron mandadas observar en el reino de Guatemala. Todas estas provincias y sus jefes fueron dependientes del Gobernador y Capitán General de Guatemala. Sin embargo a pesar de haberse establecido las intendencias, quedaban bajo la inmediata dependencia del presidente y Capitán General, ciertos corregimientos y alcaldías mayores y quedaban fuera de Guatemala, entre ellos Soconusco.  Sonsonate quedaba agregado de hecho a San Salvador.
La provincia de San Salvador, posteriormente se le dio el dio el nombre de El Salvador que se encuentra enclavada entre Honduras, Guatemala y el mar Pacífico, y aunque es el estado de menor extensión territorial, sin embargo alberga una gran población. La república de Centro América, el antiguo reino de Guatemala, era una capitanía general independiente bajo el sistema colonial. En 1820 cuando ejercía el gobierno de sus provincias en calidad de presidente y Capitán General Carlos De Urrutia, se estableció la Constitución española de 1812, dando ocasión a que se formaron dos fuertes partidos: el liberal que propugnaba la independencia  y el conservador o de oposición, formado por los españoles europeos, a cuyo frente estaba el licenciado José del Valle. Partido que venció en las elecciones llevadas a cabo, para la elección de diputados y municipales.
Del Valle, a causa de sus achaques, fue sustituido en marzo de 1821, por Gavino Gainza, cuando aún no se tenía conocimiento del pronunciamiento de Iturbide en Iguala. El establecimiento del sistema constitucional y las nuevas diputaciones provinciales, fue causa de que los gobernadores militares y el capitán general, entraran en un conflicto de competencias y la rivalidad se hizo cada vez más intensa,  a causa del interés y la ambición de los gobernadores de provincias, exacerbando las pasiones. Mandaba entonces en San Salvador  el Doctor Pedro Barriere.

Desde el año 1811 San Salvador había sufrido los sinsabores de la revolución, cuando quiso hacerse independiente y  causa y pesar  de la falta de planes y de organización, solo se redujo  a derrocar al corregidor intendente  Antonio Gutiérrez de Ulloa, promovido todo por los curas Nicolás Aguilar y José Matías Delgado, destacándose la figura de Manuel José Arce, que sería posteriormente presidente constitucional de la república.
Así fue cuando preparándose fuerzas en Guatemala para sofocar la revolución, el Ayuntamiento de esta provincia, se ofreció al general José Bustamante como mediador, y dos regidores de la misma, José de Aicinema y José María Peinado lograron restablecer el orden de San Salvador, reasumiendo el gobierno. Todo el Reino de Guatemala, en 1821 estaba pacíficamente sometido a la Corona de España, aunque el establecimiento del sistema constitucional, con las consiguientes libertades de imprenta y el protagonismo de los partidos que nacía  de las elecciones populares, estimulaban  el independentismo.

Con el grito de Iguala, los independentistas celebraron Juntas en Guatemala, aunque no todos estaban de acuerdo con el sistema de gobierno de Iturbide. Gainza, a pesar de tener el apoyo de todos los gobernadores, incluso del partido españolista, a cuya cabeza estaba Valle, nada hizo por impedir la insurrección. De cualquier forma era muy difícil que Guatemala no se proclamase independiente de la Corona española, siéndolo ya Méjico. Este estado de opinión de Guatemala, aumentó cuando de Ciudad Real de Chiapas y otros pueblos se adherían al plan de Iguala.
Guatemala finalmente consiguió, durante una sesión extraordinaria de la Junta General en el palacio del Gobierno, reunida el 15 de septiembre que fuese jurada la independencia, con una fórmula que fue arreglada por el propio Gainza y en consonancia al plan de Iguala. Los concurrentes que llenaban la sala se esforzaban  con sus gritos en que la independencia fuera absoluta de España, de Méjico y de toda otra nación y así lo firmó Gainza. De hecho el gobierno quedó en manos de Gainza y la diputación provincial convertida en Junta Provisional Consultiva. Todo ello, sin embargo, no lo acordó la Junta general ni el pueblo, sino los que quedaron en la sala, incluso por el Licenciado Valle que fue el que extendió el acta.
Iturbide abrigaba miras más amplias. San Salvador que parecía caminar en el mismo sentido independentista, intentó establecer una Junta consultiva, pero no consiguió su objetivo, reduciendo a prisión  a Manuel Arce y otros que estaban relacionados con Delgado,  un vocal de la Junta de Guatemala. Esta mandó, con el fin de pacificar la situación, al mismo Delgado que se presentó con todos los mandos y facultades, liberando a los presos e instalando una diputación provincial, continuando Delgado en el gobierno.

Con el acta  de 5 de enero de 1822 las provincias del antiguo reino de Guatemala estaban incorporadas a Méjico, y la Junta volvió al antiguo carácter de Diputación Provincial, continuando Gaínza con el mando. San Salvador, hasta entonces unida a Guatemala se separa, protestando contra la declaración de la junta consultiva y se declaró independiente, aunque también dentro de la Junta de San Salvador, había escisiones; algunos departamentos opinaban por la incorporación a Méjico, como Santa Ana y San Miguel que viendo la separación de su provincia quisieron sostener su pronunciamiento, separándose de ella. El gobierno sostenía que debían conformarse con el voto de la mayoría de la provincia, y esta sería la causa inmediata de la guerra que comenzó en 1822 entre Guatemala y San Salvador
El gobierno de San Salvador dio el mando del ejército a Manuel José Arce que pasó a Santa Ana, con el objeto de hacer que esta villa obedeciese al gobierno central salvadoreño. Pero lo que hizo fue pedir ayuda al gobierno guatemalteco de Gainza, para que acudiese en su ayuda contra las fuerzas de Arce, petición que fue atendida destinando Gainza un reducido número de fuerzas de las milicias de Sonsonate.
Ya estaban en Santa Ana pero cuando Arce llegó a la villa salieron de ella y se introdujeron en el mismo territorio de Sonsonate  que nunca había pertenecido a la intendencia de San Salvador, bajo las órdenes del sargento mayor Abos Padilla que fue perseguido por Arce, ocupando éste Ahuachapam, sorprendido en la hacienda de Espinal, derrotado y obligando a dispersas sus fuerzas.
Fue el primer acto de hostilidad en tierras guatemaltecas por parte de San Salvador y el suceso de El Espinal obligó a Gainza a tomar represalias y enviar fuerzas sobre San Salvador, una fuerza que constaba de mil hombres que partieron de Guatemala el 19 de marzo de 1822, a las órdenes del coronel Manuel de Arzú, con la finalidad de ocupar la ciudad de San Salvador.
En ella ya le estaba esperando Arce con sus fuerzas, parapetadas tras las fortificaciones que se estaban levantando esperando el ataque. Al no haber sido concluidas a tiempo y cuando Arzú se encontraba a cuatro leguas de la ciudad se le pidió un armisticio. No fue hasta el mes de junio cuando Arzú lograba entrar en la ciudad, por las faldas del volcán de San Salvador, llevando consigo artillería de grueso calibre.
La mayoría de los soldados de Arzú eran gente inexperta, llegaron a la ciudad muy cansados, a causa del esfuerzo de remontar las escarpadas vertientes del volcán, llevando consigo las piezas de artillería, además de no contar con la debida asistencia logística, y muy debilitados a causa de la escasez de alimentos. La lucha por las calles no fue muy violenta, a causa de todas estas circunstancia; esperaban también un enemigo acobardado;  aunque más numerosos que las tropas de Arzú eran tan bisoñas como las del general guatemalteco. Las fuerzas de Arzú se vieron obligadas a salir de la ciudad  en completo desorden y muchos de ellos murieron asesinados en los pueblos, a donde trataron de refugiarse después de haber sido cortados en su retirada, mientras el mismo general Arzú era hecho prisionero de los salvadoreños, que tomaron todas las armas del enemigo. A partir del ataque de Arzú, su retirada y su derrota dio un enorme influjo a la provincia  de San Salvador en los asuntos de la república.
Con la subida de Iturbide al poder en Méjico, quiso incorporar San Salvador a su imperio, entrando en guerra. El general Filisola ocupa Santa Ana y se situó en la hacienda de Mapilapa a cuatro leguas de la ciudad de San Salvador, donde permaneció hasta febrero de 1833, atacándola y entrando en ella para tomar posesión en nombre de Iturbide, finalizando la guerra con la incorporada la provincia salvadoreña al imperio mejicano. Al poco estaba formando parte de Centro América como estado federal decretando su constitución el 12 de junio de 1824.
Nejapa aparece en la historia salvadoreña como lugar de paso de los ejércitos, de estancias esporádicas en sus tierras durante el proceso de emancipación del imperio mejicano. En tiempos en que se dio el mando del ejército salvadoreño al general Rafael Merino que según las crónicas se componía de pocas fuerzas a finales de 1827, en momentos en que estaba en conflictos con Guatemala “obró el milagro de sacar a los salvadoreños de sus trincheras situándose en Nejapa con toda su fuerzas” para oponerse a las fuerzas de contreras que había establecido su cuartel general en Coatepeque.
Se cita también en las crónicas que Juan de Dios Mayorga llegaba a Caatepeque, en comisión  del presidente de Centro América, para pasar a san Salvador, llegando a Nejapa, no pudiendo  seguir puesto que el general Merino lo había tratado como un espía “llegó al mismo Nejapa [..], siendo una fortuna  para Mayorga que se le hubiese permitido el regreso”.
La realidad es que como consecuencia de estos procesos, “la opinión de todos los pueblos del estado de San Salvador, entonces en favor de la paz habían sufrido mucho en la guerra, y una dolorosa experiencia les recordaba que cuantas veces intentaron invadir Guatemala, otras tantas fueron derrotados y atrajeron en represalias sobre si mismos una invasión muy costosa y devastadora”. Nejapa fue incendiada.
En la actualidad, el Ayuntamiento de Tres Cantos dentro del Área de Acción y Cooperación al Desarrollo, contribuye  en la construcción del mercado municipal, con el equipamiento de la clínica municipal y la adquisición de una ambulancia y la construcción de la casa de la Juventud. Contribuyendo de igual modo en paliar los daños producidos por las últimas inundaciones.
Obra consultada: “Memorias para la Historia de la Revolución de centro América. Jalapa. Imp. Aburto y Blanco. Oficina del Gobierno de 1832”


MBINI (Guinea Ecuatorial)
 

Esta localidad se denominaba antiguamente Río Benito, perteneciente a la provincia ecuatoguineana  de Litoral.
Se encuentra situada en el delta del río Mbini, denominado también río Eyo, con una anchura en su cauce de 1800 metros en el centro de la costa de Río Muni.
 Durante los años ochenta del siglo XIX, los franceses, debido a las inmensa riquezas naturales y del desinterés por parte de nuestro gobierno hacia la Guinea Española, fueron ocupando de hecho, ya que no de derecho algunas partes de ella y cada vez más animados ante aquella indiferencia, terminaron por apoderarse de las zonas de desembocadura del río  Benito, situadas precisamente a igual distancia de los límite Norte y Sur de nuestras posesiones, siguiendo un plan de invasión, con la ocupación sistemática de la bahía de Corisco para avanzar sus fronteras desde el cabo de Esteiras hasta el río Imana, donde las habían fijado los tratados.
 
La ocupación de Río Benito (MBINI), era tanto como exponernos a perder todo el territorio de Guinea, máxime cuando  en Junio de 1884 una importante publicación geográfica francesa L´Exploration anunciaba que “los negros de Benito, puesto francés de la colonia del Gabón, han pedido y obtenido su anexión a Francia”, a pesar de que los derechos de España eran evidentes. 
 En marzo de 1843, la expedición militar española al mando de Lorena, fondeaba delante de la isla der Corisco. Al día siguiente de la llegada, una Asamblea compuesta de 500 individuos, entre los que figuraban los principales del país, y representantes de los reinos de Mohoma, Cumbes, Bapucus, Mazonges, Vicos, Valengues y Vengas de río Benito, esperaban a Lorena en la playa, y tras una breve conferencia declararon querer ser todos españoles y repartiendo otras banderas entre los reyes de los países citados, se libró a todos carta de anexión y de nacionalidad española y se levantó acta detallada de acontecimiento tan importante.

Después de esto, otras expediciones de menor importancia, nos pusieron en contacto con los indígenas, y fueron excelentes en todo tiempo nuestras relaciones con ellos. Las exploraciones de Iradier, los trabajos de Coello, Pellón y Rodríguez y Gómez de San Juan, consagraron nuestros derechos. En definitiva eran tiempos en que los franceses establecieron un destacamento militar y una misión en Río Benito, tiempos en que los oficiales de la marina francesa desgarraban nuestras banderas al mismo tiempo que los tratados con los jefes indígenas. Fue el Marqués de Comillas quien comenzó a cambiar el rumbo de nuestra política en el Golfo de Guinea, después de informado del porvenir que presentaba la explotación comercial de aquellas regiones, al dedicar importantes sumas de dinero para la adquisición de terrenos, compra de barcos para la navegación fluvial y establecimiento de factorías convenientemente provistas de géneros y productos españoles, siendo nombrado para esta misión el comisario de guerra D. José Valero.
Los franceses reaccionaron con el reparto de aguardiente de caña y tabaco, con el fin de atraer a los indígenas de Río Benito, aunque no consiguieron ningún resultado y el comercio español quedó establecido en este lugar, corría el año 1891.
Río Benito, al igual que todos los pueblos indígenas que se asentaban en las orillas del rio, estaba constituido  por una calle que no excedía de cien metros de longitud, en línea recta, con casas de palma, a uno y otro lado, rodeado  de abundantes plátanos e infranqueable bosque. Las casas tenían formato semejante, después de atravesar una puerta baja y estrecha, generalmente de madera mal labrada, se encontraba la estancia principal con un fogón en el centro, consistente en tres piedras reunidas de tal forma que quedaba un hueco entre ellas, donde encendían la hoguera; así mismo un tabique  también de palma, separaba lo que podríamos llamar dormitorio donde se colocaba un camastro elevado como u  metro del suelo. En alguna de aquellas estancias tenían colocada una banqueta bastante ancha y sólida, cubierta con una estera toscamente elaborada.
Usaban como embarcación troncos de árbol convenientemente ahuecados, denominado cayucos, con los que salían a dar la bienvenida a los buques que se disponían a remontar el Río Benito, después de atravesar la barra.
Una anécdota merece recordarse para retroceder a algunos modos de subsistencia de los indígenas de Río Benito. En cierto momento, los bujebas cogieron una boa aletargada de unos cinco metros,  en un cultivo de yuca, después de haber engullido una oveja del bosque próximo. Aquella boa, junto a la oveja y al corderillo fue aprovechado en los famosos envueltos o estofados que acostumbraban los bujebas, cocinados en hojas de banana bien amarrados. Finalmente la cuestión entre el Gobierno Francés y España sobre Guinea se resolvió de forma satisfactoria, por medio de un tratado que llevaba la firma del Embajador español en París, León y Castillo y de Mr. Delcassé, Ministro de Negocios Extranjeros de la nación vecina, en el que se reconocía los derechos de España en la región del Muni y del río Benito y en consecuencia, a finales de 1901 es desmantelado el destacamento francés en Río Benito. En 1907 parte del presupuesto se asignaba para la adquisición de mobiliario y banderas al puesto militar de Benito y tres botes con sus accesorios y mantenimiento.
Este puesto militar iba  a proporcionar mayores ventajas al comercio y a la población indígena, al efectuar con ellos los europeos mayores transacciones comerciales, al mismo tiempo que se evitaba la lucha  tradicional con otras tribus. Concretamente fueron destinados  a Río Benito “un teniente, como Jefe de los puertos que se iban a construir en Lendye y en N´Dote” ya que el de Benito ya existía y donde se incorporaron tres sargentos segundos, cuatro cabos indígenas, un corneta indígena y cincuenta soldados indígenas.
Destacamento que en algunos momentos se vio atacado por los indígenas en las proximidades, cosa que ocurrió durante el mes de mayo de 1908. Numerosos pamúes armados atacaron a las fuerzas coloniales y tras un rudo combate fueron rechazados; previamente habían atacado y quemado una  factoría de la casa inglesa Hatton Kookson; las fuerzas coloniales tras salir de su destacamento, asaltaron e incendiaron el poblado pamúe.
No habrían de pasar escasamente dos años cuando de nuevo los pamúes, en venganza por aquellos combates, volvieron a atacar en mayo de 1911 el destacamento de Río Benito, a cuyo frente se encontraba el teniente Felix Echagüe. Los pamúes, después de ser rechazados se hicieron fuertes en un bosque cercano de donde fueron desalojados, después de sufrir varias bajas. Al regresar el destacamento se quemaron diez poblados de los rebeldes, entre ellos uno de ocho casas y otro de doce, todos ellos estaban deshabitados. 
Pero los pamúes, armados de flechas y fusiles de pistón, no cejaban en su empeño y atacaron en otros lugares a los destacamentos españoles, envalentonados después de haber matado al español Juan Rabada e hirieron a otras personas. Los pamúes no estaban dispuestos a someterse.  En el verano de ese mismo año, los pamúes incendiaron una choza habitada por una mujer con sus dos hijos y todos perecieron abrasados por las llamas, al impedírseles la salida de la casa por padecer enfermedades infecciosas. Echagüe castigó a aquella tribus, sosteniendo con ellos una escaramuza que les causo varias bajas y destruyó sus poblados. Por aquellas fechas históricas se encontraban en Río Benito varias factorías: la sucursales de John Holt, Gerónimo López e Hijo, Woermann & Co., Compañía Trasatlántica Española y la Misión Americana (protestante).
A partir de 1920, la colonización es cada vez mayor, y los cultivos de cacao y café tienen un mayor auge. En 1936, en Guinea, tras el estallido de la Guerra Civil los gobernantes de la colonia declaran su fidelidad al Gobierno constitucional. Algunos oficiales del Ejército y la Guardia Civil son desarmados para evitar posibles enfrentamientos. Meses después, los territorios son tomados sin apenas resistencia por las tropas de Franco. En 1940 la Guerra Civil española y posteriormente la Segunda Guerra Mundial influyen sobre el incremento de la colonización de Guinea Ecuatorial, que inicia un periodo de auténtico auge. Los territorios se dividen en trece administraciones. Este hecho influye notablemente sobre el desarrollo de obras públicas, así como el crecimiento de instituciones educativas y sanitarias.
Para entonces, la colonia guineana producía más de 18.000 toneladas de cacao y 6.000 de café, además de madera tropical. La rentabilidad de la colonia proporcionaba a los españoles de Guinea unas rentas mucho mayores que las del resto de la metrópoli y un modelo de vida mucho más avanzado en muchos sentidos. Sin embargo, entre la población autóctona surgen las primeras voces que claman por la independencia. En 1959, Guinea pasa a ser una región española más, formada por dos provincias: Fernando Poo y río Muni, con Santa Isabel y Bata como capitales respectivas. Con este cambio, la población autóctona también es nacionalizada y adquiere los mismos derechos que los colonos.
En 1963 el Gobierno español concede a Guinea el estatus de autonomía y en 1965, no obstante del estatus de autonomía otorgado al territorio guineano, Naciones Unidas aprueba una resolución que insta a España a señalar una fecha concreta para la concesión de su independencia. El 12 de octubre de 1968, con la visita del comisionado del Gobierno, Manuel Fraga, se proclama la independencia de la República de Guinea Ecuatorial.
Hoy MBINI pertenece a la provincia de Litoral, la más poblada de las siete provincias de Guinea Ecuatorial y debe su nombre a que se extiende por todo el litoral Atlántico de la región continental. Su población aproximada es de 20.295 habitantes (14.034 habitantes según el censo de 1994 de los cuales 2430 vivían en la zona urbana y 11.604 en la zona rural). Es cabeza del distrito del mismo nombre (con 36 Consejos de Poblado). La población de la zona es de la etnia ndowé. Tiene puerto y está comunicada por ferry con Bolondo, situado al otro lado del río, desde donde se puede ir a Bata, hoy con un moderno puente. Antes el paso del río se efectuaba con un trasbordador desde MBINI  hasta Bolondo.
Este gran puente  que cruza la desembocadura del río uniendo las localidades de Bolondo y Mbini, es una colosal infraestructura con una longitud de 1.057 metros, levantada por la empresa constructora China Road and Bridge Corporation. Es el más largo de Guinea Ecuatorial superando al de Sendje, que tiene 800 metros. Años atrás, no había otra forma de cruzar el ancho caudal por los indígenas que por medio de cayucos, lo que era causa de numerosas pérdidas de vidas humanas y de bienes.
Cuenta Mbini con Estadio Municipal; Ayuntamiento de la localidad, Mercado Público, la urbanización Mbini II; Paseo Marítimo y Hospital.  El proyecto del Gobierno ecuatoguineano, presidido por Obiang Nguema, es convertir la localidad en una importante zona turística. Datos extraídos: Hemeroteca Nacional de Madrid y de la Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial.

 SAINT-MANDÉ (Francia)
 Saint-Mandé es un municipio de Francia, en la región de Isla de Francia, departamento del Valle del Marne en el distrito de Nogent-sur-Marne, la comuna conforma por sí misma el cantón homónimo. Debe su nombre a un abad de Saint Breton Mandé o más precisamente Maudez que vivió en el siglo VI, algunos autores que basados ​​en los escritos de San Alberto Magno, presuponen ver en él al segundo hijo de un rey irlandés. Lo más probable que él era de origen bretón. Después de haber evangelizado la Cornualles británica, se estableció en Bretaña, en el archipiélago de Bréhat. Saint-Mandé, cuya fiesta se celebra el 18 de noviembre, en la que se invoca principalmente contra las fiebres y las serpientes.
Es, después de Saint Yves, uno de los más venerados santos de Bretaña. Cuando tuvo lugar la invasión normanda se llevaron sus reliquias a través de Francia. A finales del siglo X, una de ellas llegaba a París. En el siglo XI, transferidas al Bois de Vincennes, siendo albergadas en una capilla a la cual se anexiona un priorato próximo, del que se hace constancia en  una escritura de 25 de junio 1203, como dependencia de la abadía construida en Saint-Magloire en París y residencia del Abad.
Los monjes del priorato fueron los primeros habitantes de Saint - Mande. Desde muy temprano, algunos trabajadores y cultivadores asentados en él, tenían derecho a asistir a los servicios en la capilla, sin embargo, hasta la Revolución, la autoridad de la parroquia que tenía su sede en Charenton-Saint-Maurice (ahora Saint-Maurice) hacía que sus sacerdotes siempre reservaban el derecho, bajo el antiguo régimen, para administrar los sacramentos esenciales.
El priorato fue en la segunda mitad del siglo XVII, reunido  bajo el arzobispado de París, siendo uno de los últimos priores Antoine Furetière, autor de "burguesa romana" que tuvo ciertas desavenencias con la Academia francesa, de la que fue miembro, por haber publicado un diccionario de la lengua francesa ante la asamblea, llegando a ser encarcelado.
Felipe Augusto hizo organizar una colección de animales salvajes en el sitio del actual ayuntamiento, para encerrar la vida silvestre que Ricardo Corazón de León le había ofrecido. Desde 1274, el rey Felipe el Atrevido, que quería ampliar el dominio real del Parque de Vincennes, adquirió muchas tierras pertenecientes a los residentes de la localidad. Ellos tuvieron que reconstruir un poco más lejos de sus hogares, a lo largo del muro de cierre del rey había construido. El " chiaussé la Estanc " mencionada por primera vez en 1276 este faldón.
En el siglo siguiente se construyó la torre de Saint - Mande, junto a la puerta de entrada del Castillo de Vincennes. En 1376, el rey Carlos V concedió a los habitantes de la aldea, mediante carta real, una serie de privilegios que ya disfrutaban los de Vincennes.
 El más antiguo señor de Saint - Mande cuyo nombre ha llegado hasta nuestros días es de Guy Bosque. Desde el siglo XVI hasta la Revolución, el señorío de Saint - Mande pasó sucesivamente a manos de familias Orgemont de Fortia, L'Arche, d'Aumale, Camus, Nicolai y Be'rulle.
 En 1657, el superintendente Fouquet se instaló en Saint-Mandé. Con la intención de hacer un puerto deportivo cerca del castillo de Vincennes en colaboración con Mazaríno estaba pasando el verano. Fouquet hizo construir una suntuosa biblioteca con jardines de naranjos albergando 30.000 volúmenes y done se expusieron muchas obras de arte y pinturas de grandes artistas.  Después de la caída de la Superintendencia, en 1661, permaneció abandonada mucho tiempo, hasta que en 1705 fue ocupada por las Religiosas Hospitalarias de Gentilly que sostenían un hospital hasta el comienzo de la Revolución. Cuando se fueron, alrededor de 1795, la tierra fue subdividida.
Con la reorganización administrativa de Francia, en 1787 Charenton-Saint-Maurice dependiente de Saint-Mandé, pasa al departamento de Corbeil, dejando a los saintmandenses indifernciados. 

En 23 de junio 1790, los habitantes solicitaron a la Asamblea Nacional para exigir su independencia y luego, sin esperar respuesta, procedieron en 30 de junio 1790 a elegir a su primera municipalidad. El Charentonenjses protestaron en vano; el Decreto de 19 de octubre 1790 reconocía la existencia de la Comuna de Saint-Mandé. Su territorio que hasta ahora no había superado la actual avenida del General Michel Bizot, se extendió a los llamados bulevares de Agricultores generales, es decir, hasta el actual boulevard Picpus. Hoy se limita a un cuadrilátero formado por el Daumesnil, calle de Juana de Arco, la calles de la picea y del bulevar Mouchotte Comandante y Guyana, con un total de 23 hectáreas.
En el momento de la Revolución, Saint-Mandé apenas tenía 200 habitantes. Con la venta de bienes nacionales se favoreció la construcción y la población aumentó rápidamente, duplicándose al final del Imperio.
En 1814 y 1815, los ejércitos aliados que asedian el lugar Daumesnil Vincennes defendidos por el famoso general de la pata de palo, ocuparon las aldeas alrededor y es en los altos con vistas al lago St. Mandé donde se establecieron baterías para atacar el frente occidental de la fortaleza. En 1814, tuvo lugar una cuenta batalla, en la que se distinguieron los estudiantes de la Escuela Politécnica, cerca de la torre de Saint-Mandé. En 1815, la sede se edujo a un bloqueo.
 A partir de la Restauración, Saint-Mandé, a través de la labor de los funcionarios municipales, tomó un rápido crecimiento. El primer ayuntamiento fue construido en el borde de la actual calle de la República y Place Charles Digeon en 1831. En 1865 fue demolido y reconstruido en su actual ubicación. Se verá agrandado y embellecido en 1935 y su sala, una de las más bellas de la región de París, fue completamente renovada.
Saint - Mande desde muy temprano tuvo vocación social. El Hospicio Saint-Michel fue fundado en 1825 en su territorio, con el legado de Boulard. El Hospicio Lenoir Jousseran contiguo, la era en el año 1880 a través del legado de la señora Jousseran, viuda del señor Lenoir. Desde 1858, estaba en servicio el nuevo hospital militar en la región de París que más tarde tomó el nombre de un hospital Bégin. El Instituto Departamental de Ciegos, fundada en 1880 por   Maison Alfort fue trasladado a Saint-Mandé en 1889. El Servicio de Protección a la Maternidad e infantil inaugurado en 1949 y la Creché jardín de infancia que lo fue 1955, compiten entre las mejores realizaciones departamentales de este género y fueron construidos en un terreno donado a la ciudad por Lady Grevin, viuda del fundador del famoso museo. El Sr. y la Sra. Grevin vivieron en Saint-Mandé.
La población aumentó rápidamente, mientras que la extensión continuada de París, había llevado dos veces la anexión a la capital una parte de la municipalidad. El 1 de enero de 1860, el área de la misma se incrementó en alrededor de 500 245 ha. Una nueva amputación en 1929 redujo a 92 ha. La ciudad, casi en su totalidad encerrado dentro de su poderoso vecino, mantuvo su personalidad y el carácter de la popular ciudad residencial de sus habitantes. Estos fueron 1.700 en 1830, 5.000 en 1859, 2.600 en 1860 después de la anexión por la ciudad de París desde el territorio entre el recinto Agricultores General y las nuevas fortificaciones militares, 4.500 en 1866, 15.700 en 1901, 25.000 en números redondos al censo de 1962, 18 680 en 19 90.
        Entre los acontecimientos notables se incluye el duelo mortal en Bois de Vincennes; donde el publicista Armand Carrel en 1836 frente a Emile de Girardin, se batió, sucumbiendo dos días después en Saint-Mandé, y fue sepultado en el Cementerio del Norte. Una gran multitud siguió a su convoy. Su tumba está coronada por una hermosa estatua de bronce del famoso escultor David d´Angers. 
Muchas celebridades han vivido o residido durante algún tiempo en Saint- Mandé: emperatriz Eugenia, Francisco II, el último gobernante del reino de las Dos Sicilias, Victor Hugo durante dos meses en 1843, George y su padre Jules Courteline Moinaux, compositor Jacques Offenbach, cantante Paulus, etc, Yvette Guilbert, el famoso creador de "Fiacre" de Xanrof, se crio en Saint-Mandé, Alexandra David Neel, orientalista considerado gran viajero, a quien  gustaba llamarse a sí mismo como un parisino Saint-Mandé. Su escudo de armas, cuartelado en cruz, corresponde: el primero  a Fouquet. De plata una ardilla rampante de gules. El segundo de azur, una torreta y muralla de sable, de su propiedad. Tercero de azur ondas de plata acompañado de creciente del mismo color, alusivas a los arroyos del Bois de Vincennes y al lago Saint-Mandé. Cuarto de gules, tres moletas de oro y cabrio de oro, armas de Berullé. Las ramas de lirios, la carcasa y la cimera, recuerda su pertenencia al dominio real de Vincennes. El lema Cresco y Floresco: crecer y florecer.
Nicolás Fouquet, nacido en París en 1615, se convirtió en Superintendente General de Finanzas en 1653. 1654 adquirió una propiedad en Saint-Mandé, rodeada de jardines franceses diseñados por Le Nôtre. Los del castillo de Vaux le Vicomte desaparecieron, castillo que suscitaron los celos de Luis XIV, alimentados por Colbert. Esta es la casa de Saint-Mande que descubrimos en los cuadernos famosos y que contribuyeron a su pérdida. Arrestado en 1661, fue condenado y trasladado a la prisión estatal de Pinerolo, donde murió en 1680.
Alice Guy Blanche, nació en Saint-Mandé, en 1873 se convirtió en la primera mujer en el mundo director, director y productor. Murió en 1968 en Wayne (EE.UU.). Alexandra David Néel.  Esta famosa exploradora nació en Saint-Mandé el 24 de octubre 1868 Después de numerosos viajes a Europa y África, Asia y viaja al Tíbet. En 1924, entró en Lhasa. Ella es el primer explorador occidental en el mundo en lograr esta hazaña. Dejó algunos libros escritos y murió en Digne el 8 de septiembre, a los 101 años. Charles Nungesser nació en París en 1892. Gran aviador, durante la Primera Guerra Mundial, intentó el 08 de mayo 1927 cruzar el Atlántico en dirección a occidente, con François Coli a bordo del White Bird, despareciendo, probablemente frente a Terranova.
Nacido en 1827 y muerto en 1892, Alfred Grévin se estableció en 1867 en Saint-Mandé y creó el museo de cera que lleva su nombre.
Nacido 14 de septiembre 1903 en Saint-Mandé, en la casa donde sus padres regentaban una panadería, Emilia Chauchoin comenzó su carrera como actriz bajo el nombre de Claudette Colbert. Recibió un Oscar en 1934. Murió en Barbados en 1996. Armand Carrel. periodista nacido en Rouen en 1800, fundó en 1830, con Thiers, el periódico Le National. A raíz de una controversia con el publicista de Emile de Girardin, se bate en duelo con él. Se lleva a cabo en el Bois de Vincennes, detrás del ayuntamiento de Saint-Mandé. Gravemente herido, Armand Carrel es transportado a un amigo, Louis Peira, donde murió 25 de julio 1836.y enterrado en el Cementerio del Norte. El dramaturgo Jules Moinaux nació en Tours en 1815 y murió en Saint-Mandé el 3 de diciembre 1895.  Traducción y datos de la  Web oficial de Saint Mandé.

 

                                                  FIN

1 comment:

Anonymous said...

Falta, creo, la ciudad de Columbia (Maryland; EE.UU.)