Un funesto día en Edchera

Un funesto día en Edchera.

Faltaría a mi verdad si no manifestara que confeccionando este capítulo, no estuviese pensando en la muerte del padre de un amigo mío, el capitán Jáuregui.

La mayoría de los españoles estaba pendiente del sorteo de Navidad de aquel domingo 22 de diciembre de 1957, ya que por primera vez se retransmitía por televisión; mas al sur el capitán Juregui, se encontraba comprometido en la defensa de nuestro territorio, al que llevaba hostigando la insurgencia del Ejército de Liberación. Al mando de un Grupo de combate, machaba siguiendo sensiblemente la margen izquierda de la Sebguia El Hamra para alcanzar el oasis de Meseied, cuando fue atacado con fuego de fusilería, desde los escarpes del otro lado del cauce. El enemigo, al ver el arrojo con el que cayeron sobre ellos los españoles, huyeron hacia Edchera y Tafudart.

Veintidós días después, una nueva salida de reconocimiento, esta vez por la margen derecha del Hamra e integrada su compañía en la vanguardia, forma parte de la XIII Bandera de la Legión que mandaba el Comandante Rivas. El teniente Vizcaino al mando de la 3ª Compañía cubría el flanco derecho; el Capitán Girón al mando de la 1ª Compañía cubría el flanco izquierdo y por último el Capitán Villar al mando de la 5ª se constituía en retaguardia,completaban el dispositivo de marcha.

El avance parecía discurrir sin contratiempos, el capitán Jáuregui al mando de su vanguardia podía alcanzar el paso de Edchera, bajando al acantilado hasta llegar al fondo del cauce, había resultado sorpresivo para algunos de los insurgentes que se encontraban en los bordes escarpados el paso de su unidad, por lo que iniciaron el tiroteo contra el grueso el resto de los rebeldes del Ejército de Liberación que se incorporaban precipitadamente al mismo borde, desplegándose a lo largo del mismo, mientras el teniente Gamborino, en punta de vanguardia de Jauregui, se quedaba en la parte alta del acantilado y al inicio de la bajada del paso, para responder a los disparos enemigos.

Jauregui había efectuado el movimiento de bajada al cauce; sus secciones lo hacían cubriendo los flacos derecho e izquierdo en el descenso. Detrás de Jauregui iniciaba el descenso los primeros efectivos de la 1ª Compañía al mando del capitán Girón, con la intención de efectuar un envolvimiento a espaldas del enemigo, después de escuchar los primeros disparos; simultáneamente Jauregui vio llegar hacia a él un nutrido grupo de insurgentes, procedentes del borde del oasis de Meseied (Meseida en el croquis).

El comandante Rivas jefe del dispositivo, viendo la intensidad del fuego hacia el grueso que en aquella llanada se pegaba al terreno, donde los únicos abrigos posibles para protegerse del fuego rasante eran unas pequeñas dunas endurecidas, en forma de media luna donde a apenas cubría la cabeza, ordenaba al capitán Girón que volviera sobre sus pasos con su unidad para interponerse entre los vehículos y el borde de la sebguia.

De resultas, Jauregui con parte de sus hombres se había quedado aislado a merced del enemigo. El teniente Gamborino había resultado muerto, arriba en el borde del acantilado junto a uno de sus hombres y la lado de su vehículo ligero. También resultó muerto el mando de la 3ª compañía el teniente Vizcaino aunque no serían los únicos, pues en aquella jornada dejaron sus vidas el brigada Fadrique, los sargentos Simón González y Fernandez Valverde, cuatro cabos primeros, seis cabos y treinta y siete caballeros legionarios.

Llegada la noche y apagado el fuego de las armas, el grueso de la bandera se retiró hacia posiciones mas ventajosas, constituyendo un dispositivo de erizo, aprovechando unas grasas a retaguardia del borde del margen derecho de la Sebguia El Hamra, a la espera de reanudar el combate al día siguiente. No fue el caso ya que los insurgentes habían huido del campo, dejando tras de si algunos de sus compañeros abatidos.

El capitán Jauregui murió junto a los que acribillado a balazos y machetazos, juntamente al puñado de hombres cercados y copados por un enemigo superior en número que en el fondo del acantilado se defendieron heroicamente. Próximamente en : APUNTES PARA LA HISTORIA DEL SAHARA OCCIDENTAL Y DEL PUEBLO SAHARAUI. Contraportada.

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